UN LARGO DÍA

Hoy fue un día muy largo, empezamos yendo a Shayará, ya que todos los jueves son temáticos, en esta opotunidad el chef, Eduardo Moreno, hizo un menú de comida oriental. Hubo una combinación sabores espectaculares, todos los platos estuvieron excelentes. Una vez mas el restaurant dio la talla, con un servicio impecable y un menú impresionante.


Fueron varios platos, comenzamos con una sopa de leche de coco con foi gras y malojillo, luego unas vainitas con rábano en un caldo de vegetales y mirin que estuvo sensacional. Después vino un bacalao fresco con una reducción de amareto y arroz inflado, le siguió un sashimi de atún maserado con pimienta coreana y pac choy . Luego un pan chino (parecia una arepita) relleno de cochinillo, que era para alucinar, fue el plato que más me gusto, para terminar el menú salado vino un arroz chino con magret de pato.

El postre fue un helado de 5 especias con un aire de limón que estuvo muy sabroso y refrescante. La pasamos muy bien en el restaurant y felicito a Eduardo por su creatividad.

De allí nos fuimos a Lola (un restaurant nuevo que abrió la misma gente de Malabar), pero nos rebotaron, no nos dejarón ni tomar un trago parados, me pareció muy mal educado la persona que nos atendió (creo que se llama Fidel), el sitió se veía bellísimo, lástima que el personal lo opaque tanto.

Bueno como quedamos picados nos metimos en Pacífico que esta cerquita, nos tomamos unos tragos y nos fuimos para Miró, en el Hatillo, donde pasamos un rato excelente. Estuvimos hablando con Alex, dueño y chef del local, hasta las 4 de la mañana, de verdad este sitio siempre nos deleita con la atención y la comida.